hacerlo hablar por los ojos de un ciego
desgarrar los nudillos a un guante de box
hincharlo
hasta que se le salgan todas las voces de un llanto,
cristales y de piedras,
de caricias y de espantos.
Mirarlo bajo la lupa del dios sol
tomarlo por el cuello y desplumarlo
hacer la incisión en el preciso verso
¿Cómo desentrañar un poema y cocinártelo?